
Casimiro Mahou Cerveza Ale con tarta, dulce maridaje
Maridajes
La cerveza es tan versátil como otras bebidas. Aunque pueda percibirse como una combinación arriesgada, los amantes de la cerveza aprecian sus maridajes incluso con postres. Como en cualquier otra combinación de platos y bebidas, el secreto radica en identificar los aromas y sabores de la cerveza y jugar a descubrir si estos casan con los del postre que vamos a preparar o degustar, para que la bebida y el plato mariden.
En Palma Brew, tienda especializada en cervezas del barrio de Conde Duque, este maridaje es de lo más natural ya que además de sus decenas de referencias de cervezas, también tiene una amplia carta de tartas caseras. Uno de sus clásicos es la Key Lime Pie, una tarta ácida que recomiendan maridar con una Red Ale o una Brown Ale; su tarta de frambuesa, por ejemplo, iría bien con una Ale de triple fermentación, por el dulzor y la carga alcohólica. Sus recomendación fundamental es prestar atención al grado de acidez y amargor de la cerveza, pues ha de ser más dulce que el postre al que acompaña.
Para degustar con una tarta, es preferible elegir las gamas más maltosas, tostadas y oscuras, con notas de café o chocolate y sobre todo, que tengan un punto dulce. Hay que tener en cuenta que, conforme degustemos el postre, el sabor de la cerveza va a perder realce; por eso elegiremos cervezas con mucho cuerpo, intensas y con personalidad. También son buena compañía para los postres las cervezas muy alcohólicas, en especial las Barley Wine, en las que predomina el sabor del alcohol y que combinarían bien con chocolates o frutas.
Entre las cervezas de la colección, Casimiro Mahou Cerveza Ale es la cerveza más adecuada para acompañar a un postre. Con una graduación de 6,4º, es una cerveza con poco amargor, que se encuentra muy equilibrado con el alcohol y las maltas. Sus notas a pan tostado y textura aterciopelada la hacen buena compañía de una tarta. De las tartas de su menú, en Palma Brew, sugieren para acompañarla un bizcocho con crema de plátano y nueces caramelizadas. La cerveza encaja con el almíbar un poco borracho que empapa el bizcocho y con el plátano flambleado que la recubre; su crema de nata y plátano tiene un gusto muy dulzón, que la cerveza limpia del paladar, para dejar un regusto muy interesante en la boca. Una combinación cremosa y dulce para disfrutar de Casimiro Mahou Cerveza Ale hasta los postres.